TREN MONTEALTO
1, 2, 3, 4… Volando
Por Carlos Zaldívar
Mucha gente, muchos jóvenes y mucha música en un ambiente sano y lleno de alegría. Desde la entrada muchos murmullos se referían a Tren Montealto. Amigos de ellos, conocidos, recomendados y uno que otro colado, pero todos o casi todos ya los habían escuchado.
Simplemente porque la gran mayoría coreaba y cantaba a la par de Cheyk (Vocalista) y se movían tras el ritmo de Beto (Teclados).
El cartel mostraba a 3 grupos: “La Especialidad De La Casa” de quienes la música se escuchó bien, pero no me atrevería a escribir mucho sin antes volver a “degustar” su show. Fue otro estilo al cual no estoy tan acostumbrado (y eso que Zappa es un ídolo).
“Atomic Blue” fue quien cerró esa noche sabatina y a quienes les debo mi presencia para realizar alguna crítica objetiva. Mil disculpas, pero el tiempo (sí, el maldito tiempo) que impide el vanagloriarnos de los placeres musicales.
Y mis amigos los Trenecillos, quienes su presentación en el escenario y fuera de él, fue espectacular. Cada uno de ellos recorriendo el pequeño antro y saludando a muchos de los asistentes, muy cordiales y siempre en el mismo canal.
La cita en el Pool fue desde las 10:00 pm y el tiempo transcurría, y transcurría (al igual que las cervezas) y casi pasadas las 11 de la noche, el TREN hizo presencia tras los instrumentos. No requirieron del Sound Check y apenas Edoardo (Batería) daba las “instrucciones de arranque” cuando se encarrilaron y todos quedamos inmersos en sus rolas.
Tengo que hacer mención, que esta vez casi no hubo interrupción alguna en su sonido, siempre al terminar cada canción, uno u otro instrumento seguía con pequeños acordes, lo cual significaba que se alargaba la rola anterior o que era una introducción para la posterior, pero fue muy apasionante.
Seguramente se sintieron más en empatía con el público, quienes aplaudíamos sus rolas y las entonábamos al igual que ellos, les producía placer. Y es que no cualquier grupo disfruta de un público tan especial y exigente. Tren Montealto, ya es TREN MONTEALTO…
Amigos ferroviarios, mil gracias por su atención a mi persona, frente a un público jubiloso. De hecho no es necesario, basta con que sigan por ese camino de la cultura musical, que no abandonen el camino que los ha juntado. Han formato una sinergia inigualable y que muchos otros grupos envidiarían. ¡Vayan siempre adelante!
Otro punto que resaltó mucho fue la guitarra de Cheyk, que sonó más aguda y le dio más sabor a sus composiciones, sobre todo en “No Me Puedes Ver”, y es que gracias a la dedicatoria y a la inmersión que he tenido en la letra, me sigo “clavando más, y más… y más…”
De la nueva canción, “1, 2, 3, 4…” excelentes coros, mejores agudos de la guitarra, más notorio el bajo (a cargo de Erik) y ni se diga de los teclados, todos al unísono rimo de “1, 2, 3, 4…” quienes junto con el público hicieron que las emociones nos recorrieran una vez más.
Terminaron, o más bien trataron de terminar, pero fue tanta la emoción y el festejo de algarabía musical ante ellos que se les permitió un encoré más, y terminaron con “Volando” (úrgeme tener esa súper rola) y entonces fue cuando el sentimiento me hizo preguntarme - ¿Ya?, ¿Eso es todo?, ¿No podían tocarlas de nuevo? –
Miré el reloj, volví a disculparme con Atomic Blue (seguro nos vemos en la próxima), me dirigí a la salida y emprendí el éxodo… Minutos más tarde, en el ciberespacio les dejé mi “comment” a mis amigos de TREN MONTEALTO.
Caray, ¡Que grupazo!
Una dedicatoria especial a mis amig@s, alumnas, ex alumnos y colegas del CUDEC, con quienes comparto única y exclusivamente buena música.
P.d. ¡Me encantaría verlos terminar “Todos Juntos Al Final”!
carlos@zaldivar.org.mx
Simplemente porque la gran mayoría coreaba y cantaba a la par de Cheyk (Vocalista) y se movían tras el ritmo de Beto (Teclados).
El cartel mostraba a 3 grupos: “La Especialidad De La Casa” de quienes la música se escuchó bien, pero no me atrevería a escribir mucho sin antes volver a “degustar” su show. Fue otro estilo al cual no estoy tan acostumbrado (y eso que Zappa es un ídolo).
“Atomic Blue” fue quien cerró esa noche sabatina y a quienes les debo mi presencia para realizar alguna crítica objetiva. Mil disculpas, pero el tiempo (sí, el maldito tiempo) que impide el vanagloriarnos de los placeres musicales.
Y mis amigos los Trenecillos, quienes su presentación en el escenario y fuera de él, fue espectacular. Cada uno de ellos recorriendo el pequeño antro y saludando a muchos de los asistentes, muy cordiales y siempre en el mismo canal.
La cita en el Pool fue desde las 10:00 pm y el tiempo transcurría, y transcurría (al igual que las cervezas) y casi pasadas las 11 de la noche, el TREN hizo presencia tras los instrumentos. No requirieron del Sound Check y apenas Edoardo (Batería) daba las “instrucciones de arranque” cuando se encarrilaron y todos quedamos inmersos en sus rolas.
Tengo que hacer mención, que esta vez casi no hubo interrupción alguna en su sonido, siempre al terminar cada canción, uno u otro instrumento seguía con pequeños acordes, lo cual significaba que se alargaba la rola anterior o que era una introducción para la posterior, pero fue muy apasionante.
Seguramente se sintieron más en empatía con el público, quienes aplaudíamos sus rolas y las entonábamos al igual que ellos, les producía placer. Y es que no cualquier grupo disfruta de un público tan especial y exigente. Tren Montealto, ya es TREN MONTEALTO…
Amigos ferroviarios, mil gracias por su atención a mi persona, frente a un público jubiloso. De hecho no es necesario, basta con que sigan por ese camino de la cultura musical, que no abandonen el camino que los ha juntado. Han formato una sinergia inigualable y que muchos otros grupos envidiarían. ¡Vayan siempre adelante!
Otro punto que resaltó mucho fue la guitarra de Cheyk, que sonó más aguda y le dio más sabor a sus composiciones, sobre todo en “No Me Puedes Ver”, y es que gracias a la dedicatoria y a la inmersión que he tenido en la letra, me sigo “clavando más, y más… y más…”
De la nueva canción, “1, 2, 3, 4…” excelentes coros, mejores agudos de la guitarra, más notorio el bajo (a cargo de Erik) y ni se diga de los teclados, todos al unísono rimo de “1, 2, 3, 4…” quienes junto con el público hicieron que las emociones nos recorrieran una vez más.
Terminaron, o más bien trataron de terminar, pero fue tanta la emoción y el festejo de algarabía musical ante ellos que se les permitió un encoré más, y terminaron con “Volando” (úrgeme tener esa súper rola) y entonces fue cuando el sentimiento me hizo preguntarme - ¿Ya?, ¿Eso es todo?, ¿No podían tocarlas de nuevo? –
Miré el reloj, volví a disculparme con Atomic Blue (seguro nos vemos en la próxima), me dirigí a la salida y emprendí el éxodo… Minutos más tarde, en el ciberespacio les dejé mi “comment” a mis amigos de TREN MONTEALTO.
Caray, ¡Que grupazo!
Una dedicatoria especial a mis amig@s, alumnas, ex alumnos y colegas del CUDEC, con quienes comparto única y exclusivamente buena música.
P.d. ¡Me encantaría verlos terminar “Todos Juntos Al Final”!
carlos@zaldivar.org.mx
1 comment:
teacheeeeeer!!! lol!! i love the review!! lol is su amazing!! and i also want the song volando! lol!!
when u have it please tell me !!!!
because i want it too!!! i want it! lol! love tren montealtoooooo!!!!!
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