FOREIGNER
Ni los hermanos Wachowsky hubieran recargado de una manera tan vigorosa a este sexteto de “forasteros”.
Por
Cómo olvidar aquellos años de la secundaria donde mi compañero de banca, José Manuel, y un servidor, entonábamos por horas la rola de “JUKE BOX HERO”. Era el año de 1981 cuando salió al mercado el formidable álbum titulado “4”; y era la segunda rola del lado “A” la que merecía tan consistente repetición en horas de clase.
También de ese LP se desprenden grandes éxitos como “Night Life”, “Break It Up”, “Girl On The Moon”, “Waiting For A Girl Like You” para cuando estuviéramos en el momento meloso de regalar cassettes a nuestras amigas (y a veces amores platónicos); y el súper hit “Urgent”, del cual esperábamos ansiosos ver el video en el programa “20/20” del canal 5 por las tardes.
Hoy, después de casi 25 años tuve la grandiosa oportunidad de disfrutarlos en vivo y volver a recordar esa época maravillosa.
Esta banda se fundó en 1976 por los británicos Mick Jones e Ian McDonald, quienes reclutaron a otros cuatro miembros: el británico Dennis Elliot (excelente baterista) y los norteamericanos Ed Gagliardi, Lou Gramm y Alan Greenwood; para que en 1977 sacaran su álbum debut titulado simplemente “Foreigner” del que destacan los éxitos “Feels Like The First Time”, “Cold As Ice” y “Starrider”.
Para el siguiente año lanzan “Double Vision” de donde sobresalen “Hot Blooded” y obviamente la rola homónima; y así con todos sus álbumes, llenos de éxitos, recuerdos, melancolías y mucha felicidad. En casi todos ellos destaca Lou Gramm en las vocales y aseguro que Foreigner lo mando al estrellato y le dio carisma a su vida… la cual terminó a principios de esta década, aunque hoy todavía anda en giras no muy exitosas.
La banda sufrió (y a veces gozó) muchos cambios, de sexteto se convirtió en quinteto, cuarteto y hoy es nuevamente sexteto. Por sus filas también pasaron Rick Willis, Johnny Edwards (quien alguna vez suplió a Gramm en las vocales), Mark Schulman, Ron Wikso, Brian Tichy, Denny Carmassi y Bruce Turgon.
Para celebrar sus veinticinco años de carrera, Foreigner lanzó en el año 2002 un DVD con un concierto donde se aprecia a Lou Gramm con un sobrepeso notable, la voz atrofiada y los arreglos tratándose de adecuar a la época ochentera. Un buen DVD para coleccionistas y fans de las “buenas memorias”, pero con una gran falta de calidad musical e innovaciones.
Vinieron a México, no recuerdo bien si hace 4 ó casi 5 años, y se presentaron en un Auditorio Nacional medio vacío (o medio lleno) y Lou Gramm dejó mucho que desear… Iniciaba una etapa de decadencia para Foreigner. Por razones de viaje, no pude estar presente, pero la comunidad rockera de la ciudad es lo que comenta.
De hecho su último álbum fue lanzado en 1995 bajo el nombre de “Mr. Moonlight” y de ahí tuvieron que pasar cinco largos años para lanzar una Antología de nombre “Juke Box Heroes” de dos discos con 39 éxitos.
Hoy podría decir que no cuentan con nuevas producciones, pues han pasado más de 10 años de la última y de ahí han sido recopilaciones, antologías, conciertos y más recuerdos.
Pero Mick Jones, el gran jefe de estos “forasteros”, se dio a la tarea de “recargar” a Foreigner inyectándole sangre nueva y quedando con la siguiente alineación: Mick Jones en la guitarra, Jason Bonham (descendiente del Dios “Bonzo”, nacido de aquel “Maldito Zeppelín de Plomo”) en la batería, Jeff Jacobs en los teclados, Jeff Pilson en el bajo, Thom Gimbel en la guitarra, la flauta y el saxofón y en las vocales a un extraordinario “jovenzuelo” con mucho carisma (quien nos hizo olvidar por completo a Gramm), lleno de energía y con unas excelentes cuerdas vocales: Kelly Hansen.
Esto fue lo que constaté el pasado veintidós de marzo, en el ya clásico Teatro Metropolitan. A la hora marcada para iniciar el concierto, el recinto estaba a menos de la mitad de su capacidad, por lo que de mi lugar (hasta arriba en las últimas filas) comencé a bajar, esperando llegar a la primera fila del primer piso. Luego de varios acomodamientos muchos de nosotros logramos estar en la planta baja a tan sólo unas filas del escenario, es decir, en primerísimo fila, al pie del escenario.
Los guitarrazos de Mick y la bataca de Bonham se hicieron presentes y al ritmo de Double Vision inició la fiesta en punto de las nueve horas con doce minutos…. Y fue cuando Kelly (quien se dio el lujo de iniciar el concierto al estilo de Steve Marriot con un yeah, yeah, yeah), al ver algunos espacios vacíos, nos convocó a todos los asistentes a estar frente a ellos, y así sucedió. De pronto me sentí como en el Circo Volador, donde la capacidad es menor, y todos estamos parados frente al escenario, más comunicados con los músicos.
Esta vez estuve a tan sólo unos 3 ó 4 pasos del mismísimo escenario donde paseaban Jones, Hansen, Pilson y Gimbel.
Después de aceptar semejante invitación se aventaron “Cold As Ice” y fue muy motivador ver a Kelly brincar del escenario y pasearse por las butacas, ayudado de varios fanáticos y entonces nos dimos cuenta de la magnitud de la fiesta en la que estaríamos presentes. Toda una “fiesta pagana” para adorar a los Dioses del Rock & Roll.
A la gran mayoría de las canciones les metieron nuevos arreglos, y para muestra bastan varios botones.
Se aventaron “Say You Will” en una versión totalmente acústica donde todos, absolutamente todos, cantamos al compás de la guitarra de Jones. Fue una rola muy placentera…
Además tengo que hacer mención que los primeros “batacazos” de Bonham correspondieron a “Rock & Roll”, pero duraron tan sólo unos segundos, que fueron suficientes para recordar, y jamás olvidar, de quién es su padre… honor a quien honor merece, y que siga descansando en paz, mi estimado John Bonham.
No faltaron los momentos melosos, y Kelly pudo constatar el porque acompaña a Foreigner como nuevo vocalista. Tiene gran carisma para interpretar cualquier rola que le pongan enfrente, y a la hora de entonar “Waiting For A Girl Like You” y “I Want To Know What Love Is” se apoderó del micrófono, empuño el corazón a la nostalgia y vivimos recuerdos extraordinarios. Todo un suceso melancólico donde pasaron gratos momentos de la preparatoria por mi mente.
¿A qué hora llegaría “Urgent”?
“I Don’t Want To Live Without You” fue la otra balada súper romántica que entró a la hora del encore… y ¡que sentimiento de Kelly! acompañado de la guitarra tan suave y sutil de Jones.
Otro momento majestuoso fue cuando el bajo de Pilson se empezó a escuchar por largos segundos, tras una breve introducción de Jones y de Bonham; entonces, supimos que vendría Juke Box Hero. Y así fue. Estuvimos en el máximo apogeo de la fiesta, cantando, brincando, gritando y aclamando a estos “forasteros” tan joviales y con mucha energía. Apreciamos los nuevos arreglos para esta rola que la alargaron y para hacerla más emotiva metieron en el último tercio de la misma, un fragmento de la inolvidable “Whola Lotta Love” de la banda legendaria “Led Zeppelin”; y de pronto regresaron a Juke Box, finalizando muy entusiasmados; y Kelly agradeciendo al público con un español bien fluido su asistencia, y también agradeciendo a sus compañeros músicos el haber permitido dejar que esté con ellos.
También se aventaron “Feels Like The First Time”, “Starrider”, “Dirty White Boy” (¿Algún parecido con Kelly Hansen?), “That Was Yesterday” y “Night Life” entre otras.
Parado frente al escenario, mientras Kelly nos hablaba y invitaba a cantar, pensé en el sax de “Urgent”: ¿Cómo sonaría?, ¿Sería otro sax “parecido” al álbum “4”?, ¿Se le irían los tonos como en las versiones en vivo?, O, ¿Qué nuevo arreglo traerían? O quizás ya lo traería grabado. La respuesta no tardó mucho.
Mick inició con su guitarra tan viva los acordes para “Urgent” y entonces el recinto se convirtió en una locura más… La disfrutamos, gozamos, y nuevamente los recuerdos se apasionaron de mi cuerpo y alma… Me trasladé con todos mis amigos de aquella época y a las fiestas que fuimos, llenas de buena música. Y la sorpresa mayor fue cuando Thom Gimbel hizo del saxofón una extensión de sus extremidades superiores y de su alma, principalmente. Este sax, mejoró cualquier versión anterior de todos los tiempos. Fue “tocado” el sax con una pasión exagerada que la misma versión en estudio le quedó corta. Fue el sax, la cereza del pastel. Fue Gimbel quien puso esa cereza y quien se mereció tremendos aplausos… y también fue el sax, el que nos hizo vibrar por dentro, porque todos sentimos nuestras venas a punto de reventar, porque sentimos que se alargaban, se enredaban unas con otras y así querían continuar, escuchando el sax de “Urgent” en la voz de Kelly Hansen.
Ya tan extasiados y llenos de furor, y siendo de esos conciertos que nunca queremos que acaben, llegó el encore. Y para rematar con enormes sentimientos de Rock & Roll, se aventaron un gran homenaje al padre de Jason, John “Bonzo” Bonham, y fue con el himno “Misty Mountan Hop”. ¡Maravilloso!
Y estimado lector, esto no fue todo. Ya para rematar (ahora si el final, final), y como un orgasmo mental múltiple, llegó la inesperada “Hot Blooded”.
¿Qué más podemos pedir a la vida, si no, más puro, total y absoluto Rock & Roll?
A partir de este momento fantástico, me considero un “forastero” más en este planeta. ¡Larga Vida al Rock & Roll!
Marzo 2006.
No comments:
Post a Comment